Qué hacemos con Magaluf y cía



Recientemente nos alarmaba un titular: "Sobran diez millones de turistas". En un país donde el turismo guarda una posición tan troncal, tanto como para ascender al podio de los más turísticos del mundo, podríamos sostener sin una sesuda reflexión que aquí no sobra ningún turista, ni uno solo. Lamentablemente, las crecientes víctimas del balconing, los disturbios públicos extendiéndose a otros puntos del país como La Barceloneta o Gandía, la imagen de permisividad, desfase y fiestorra barata conducen a darle la razón al articulista. Una cosa es tomársela con humor, como el asunto del 'mamading' en El Mundo Today, pero si queremos tratar en serio la reputación de España como destino turístico, digan: ¿qué hacemos?